Un prejuicio que hay que romper
Cuando le dices J Boats a un navegante, automáticamente piensa en una regata, generalmente entre 3 boyas. Es este prejuicio el que el astillero quiere romper, demostrando que sus barcos y sus cualidades de buen caminante, son ideales para el crucero rápido. Un trabajo complicado, como explica Frédéric Bouvier. "En los salones náuticos, el reto es conseguir que los visitantes se bajen del barco. En general, ven una J y piensan en las carreras. Los navegantes no nos esperan en este mercado. "
Veleros que ya existen y son populares
El astillero ya cuenta con dos gamas para sus yates de vida a bordo. La gama E, de Elegance, está destinada a los cruceros, mientras que la gama Grand Prix se dirige a los regatistas. Contrariamente a la creencia popular, los yates de crucero representan la mayor parte de los yates de vida a bordo vendidos por J Composites. De los 30 J112 entregados, 25 son J112 Es y sólo 5 son yates Grand Prix. "Los productos existen y son populares, como demuestran los muy buenos comentarios sobre el J112E expuesto en el Grand Pavois. Nos corresponde a nosotros darlos a conocer", dice Frédéric Bouvier.
Mejor comunicación
Para romper esta imagen de barcos puramente de carreras, J Composites está trabajando en su comunicación. La presencia de las J en las regatas es suficiente para llegar a los navegantes. A partir de ahora, el astillero sólo presentará en los salones la gama Elegance, con un máximo de opciones. "Hay un J112 Grand Prix que gana en el Spi Ouest y un J112 E de crucero que presentamos en el Grand Pavois. ", ilustra el director de ventas de J Composites. Aunque el deporte siga siendo el ADN de J, pretende evitar que se difumine su mensaje a los navegantes. Un nuevo sitio web y nombres más destacados para la gama reforzarán el enfoque.
Una palanca de crecimiento
Con este trabajo de imagen, J Composites pretende continuar su desarrollo en Europa. "Sin competir con los grandes astilleros de cruceros, tenemos un lugar que ocupar y una clientela que desarrollar", dice Frédéric Bouvier.