La propulsión del barco inspirada en los peces y las bombas de corazón
El nuevo propulsor eléctrico FinX se ve desde afuera como una simple ojiva, con un agujero en la parte delantera y otro más grande en la parte trasera. Contiene un diafragma circular en el interior. Acoplado al bobinado de un motor eléctrico, la corriente que fluye a su alrededor lo pone en movimiento, creando un fenómeno parecido a una onda y a una aleta. El agua se pone en movimiento. " Imita el movimiento de los animales marinos. Es una tecnología que ya se domina en las bombas industriales o en las bombas médicas del campo cardíaco para las que ha sido patentada. Tenemos la explotación de la patente de la propulsión marina "explica Harold Guillemin, fundador de FinX motor.
Sin hélice: más seguridad y robustez
La ausencia de una hélice es la mayor especificidad de FinX en comparación con otras hélices. Es una garantía de seguridad para el navegante, evitando cualquier riesgo de lesión. Sin ningún tipo de unión mecánica, piñón o fricción, la única parte que se desgasta es la membrana, lo que garantiza la discreción y el bajo mantenimiento. " Es extremadamente robusto y es capaz de manejar escombros. Lo vemos en las bombas industriales. Y puede ser cambiado muy fácilmente "añade Harold Guillemin.
El fabricante también afirma un alto rendimiento, con hasta un 30% de ahorro de energía en comparación con una hélice a la misma velocidad (Nota del editor: en casos favorables).
Prototipo exhibido en el Nautic 2019
2 modelos de propulsores en desarrollo
FinX está actualmente finalizando su industrialización y está planificando ensayos públicos a principios de 2020. Dos modelos están presentes en el catálogo en un primer paso.
El D70, dedicado a los drones y pequeñas embarcaciones, pesa 320 gramos. Ofrece un empuje máximo de 0,5 kgf, absorbiendo una potencia eléctrica máxima de 200 W. Se vende como pre-pedido a 199 euros.
El D200, diseñado para lanchas y veleros de hasta 3T de desplazamiento, tiene un peso de 20 kg. Con una potencia eléctrica de 2kW, su empuje estático nominal es de 50 kgf. La fuente de alimentación está disponible en 24V o 48V. Se comercializa en pre-pedido a 2990 euros.
FinX planea entregar sus primeros propulsores en junio de 2020. Otros modelos pueden seguir. " Preferimos empezar con tamaños pequeños, pero el principio puede aplicarse a mayor escala "concluye Harold Guillemin.