La justicia ordena a Sealegs que pague a Orión y al contrabandista
Después de más de cuatro años de procedimientos, el constructor de barcos neozelandés Sealegs fue condenado por el Tribunal Superior de Auckland en su litigio con Orion y Contrabandista. Sealegs, pionera en el sector de las pequeñas embarcaciones anfibias, acusó a esta última de falsificación, reclamando una indemnización y el cese de la actividad de su competidor. Tras un fallo en primera instancia a su favor en diciembre de 2016, fue finalmente desautorizado por el Tribunal Superior de Auckland en agosto de 2019. Se ordenó al astillero que reembolsara a Orion y a Smuggler los 500.000 dólares de gastos legales.
Sealegs al borde de la bancarrota en un mercado en crecimiento
Si Sealegs es una figura histórica del sector, con sus sistemas de ruedas hidráulicas, el mercado de las embarcaciones anfibias ha atraído a muchos actores en los últimos años. Sólo para la industria náutica francesa, podemos mencionar los yates Iguana, las embarcaciones Wetton o los barcos Tringa. La orden de pagar sus deudas antes del 26 de mayo de 2020 podría, sin embargo, hacer desaparecer al pionero neozelandés. Ya en dificultades, si el astillero cumple con esta petición, tendrá que hacer frente a nuevos costos. El tribunal debería fijar una fecha antes de finales de 2020 para tratar la indemnización de Orión y los contrabandistas para el período comprendido entre 2016 y 2019, cuando el astillero no pudo producir un barco anfibio.
Por su parte, Smuggler Marine anuncia el rápido lanzamiento de 2 nuevos modelos de barcos anfibios en 2020.