Neander Shark asume la distribución de sus motores de Yanmar
El contrato entre el fabricante de motores japonés Yanmar Marine International y el diseñador alemán del motor fueraborda diesel Dtorque, Neander Shark GmbH, ha llegado a su fin después de tres años. Desde el 1 de junio de 2021, el fabricante alemán ha asumido la comercialización directa de sus productos. Se encarga de las ventas, el marketing y el servicio posventa. Yanmar Italia mantiene su papel de socio industrial para la producción de motores, mientras que Yanmar Europa sigue siendo responsable de las piezas de recambio y su distribución a los clientes finales. El trabajo de construcción de la red realizado por Yanmar será continuado por Neander. "La idea no es romper lo que se ha hecho, como en Francia. Al contrario Estamos en una fase de transición con el director de ventas de Neander", dice Philippe Cabot, de Yanmar Europa.
Reducción de precios en un mercado complejo de fuerabordas diésel
La elección de los dos socios se explica también por un argumento de precio y simplificación en el mercado de los yates y los pequeños servicios, que es difícil de penetrar. "Con Yanmar, había un intermediario más y era difícil penetrar en el mercado. Los motores fueraborda diesel ya son caros y hay que venderlos para que bajen de precio", confirma el ingeniero de ventas de Yanmar Europa. De hecho, el Dtorque 111, con 50 caballos, cuesta más de 30.000 euros, mientras que un equivalente de gasolina en potencia está muy por debajo de los 10.000 euros. Aunque esta solución puede ser interesante desde el punto de vista técnico y económico mientras dure el uso de las embarcaciones de servicio o de seguridad para las licitaciones, al evitar la necesidad de cargar gasolina, la inversión sigue siendo un freno. Otras marcas, como la escandinava Oxe o la británica Cox Powertrain, se enfrentan a las mismas dificultades desde hace años. El director comercial de Neander, Joel Despuig Reid, que ha asumido el mismo papel en Cox, tendrá que encontrar una solución delicada, en un momento en el que los desarrollos de los principales fabricantes de motores se orientan más hacia los barcos eléctricos e híbridos eléctricos.