El sector marítimo, una especificidad celosamente guardada
Los marinos, ya sean profesionales o recreativos, siempre han protegido su especificidad. La vida en el mar, las condiciones climáticas particulares, la agresión de la sal, las olas y el viento, los movimientos del barco han justificado innovaciones dedicadas y el nacimiento de un vocabulario especializado. Esto ha dado lugar a una imagen algo cerrada del marinero y, por extensión, de la industria marítima. El navegante, con razón, insiste en la existencia de tiendas de equipamiento especializadas y astilleros en los puertos. Aprecian la compra de sus embarcaciones y ropa en marcas especializadas. Sin embargo, no están aislados del resto de la sociedad, por lo que el sector náutico debe permanecer abierto al mundo.
Obtener lo mejor de otros sectores económicos
En todos los ámbitos, los profesionales de la náutica pueden inspirarse en otros sectores. En la venta de equipos, podemos ver que la convivencia con otros deportes de ocio al aire libre se traduce en un progreso para los navegantes. Esto puede ser en forma de equipo personal con las montañas, o de energía a bordo con los propietarios de autocaravanas. Cabesto revela su posicionamiento estratégico en nuestras columnas entre el generalismo y la especialización.
En el caso de los fabricantes de embarcaciones y equipos, ahora recurren a los mismos subcontratistas que otros fabricantes para beneficiarse de los avances tecnológicos, en cuanto a la creación de prototipos o la fabricación aditiva. El proveedor de servicios Protolabs nos lo explica a través de su oferta dedicada a la industria náutica .
Sin perder sus raíces históricas, el sector náutico debe ser capaz de observar y aprovechar la innovación en otros sectores.