Del alquiler a la construcción de yates
Nacido en Turín en 1947, Paolo Vitelli fundó Azimut en 1969, cuando sólo tenía 22 años. La empresa, que inicialmente se especializó en el alquiler de veleros, pronto se dedicó a la importación de yates, antes de lanzar sus propios modelos en 1975 con el famoso AZ 43' Bali. Pero fue la adquisición del histórico astillero Benetti en 1985 lo que propulsó a Azimut-Benetti al liderazgo mundial. Esta adquisición estratégica permitió a Azimut-Benetti integrar la artesanía de Benetti y conquistar un mercado en busca de la excelencia.
Una estrategia de diversificación internacional
Bajo la dirección de Vitelli, Azimut-Benetti ha ampliado su presencia con seis centros de construcción en Italia y Brasil. Gracias a una red de distribución que abarca más de 70 países, el grupo exporta el 95% de su producción y generará unas ventas de 1.300 millones de euros en 2023. Vitelli se ha asociado con diseñadores de renombre para ofrecer yates lujosos e innovadores. Entre sus clientes famosos se encuentran David Bowie y Cristiano Ronaldo.
Compromiso local e internacional
Además de su papel de empresario, Paolo Vitelli ha dejado su impronta a través de sus compromisos culturales y sociales. En el Valle de Aosta, ha restaurado estructuras históricas como el Hotel Breithorn y ha transformado Mascognaz en un centro turístico de lujo. También ha invertido en la creación de puertos deportivos en Italia y en el extranjero. Su papel como presidente de UCINA de 1998 a 2006 es testimonio de su influencia en la industria náutica italiana.
¿Qué le depara el futuro a Azimut-Benetti?
Desde marzo de 2023, Azimut-Benetti está dirigida por Giovanna Vitelli, hija de Paolo. Con una cartera de pedidos valorada en 2.600 millones de euros, la empresa parece dispuesta a continuar su ascenso, honrando al mismo tiempo el legado de su fundador. Esta transición demuestra la capacidad del grupo para mantenerse a la vanguardia de un sector exigente en un mundo en rápida evolución.