AYC- Cap Océan: la venta de un yate se convierte en una pesadilla para sus ancianos propietarios

Un Nautica 38 (foto ilustración)

La venta de un yate de 38 pies confiada a AYC de Port Saint Louis du Rhône ha dado un giro dramático para los propietarios. Entre el impago de las cantidades adeudadas, las dificultades financieras del intermediario y los procedimientos judiciales, los propietarios -uno de los cuales ha fallecido- siguen esperando su dinero. La abogada Sarah Tarabay explica este complejo caso, que pone de manifiesto los riesgos que entrañan ciertas transacciones náuticas.

Una decisión difícil para un propietario al final de su vida

El Sr. y la Sra. Ris, de edad avanzada y que vivían lejos del mar, habían decidido en 2023 vender su velero, un Nautica Ketch de 38 pies, ante el preocupante estado de salud del Sr. Ris, enfermo de cáncer. Se había jubilado y quería utilizar su barco para navegar por el Mediterráneo. Desgraciadamente, sus aspiraciones se vieron truncadas por la enfermedad.

Para asegurar la transacción, la pareja confió la venta a AYC en Port Saint Louis du Rhône, una agencia especializada, firmando un mandato semiexclusivo en otoño de 2023. Se acordó el precio de venta y la agencia se comprometió a movilizar su red para encontrar un comprador. En enero de 2024, cuatro meses después de la puesta en venta, se firmó un preacuerdo de venta con un comprador belga. La entrega estaba prevista para febrero de 2024 y el contrato estipulaba que el pago debía efectuarse a más tardar el 3 de marzo de 2024.

Pagos que no llegan

A pesar del plazo contractual, no se pagó ninguna suma a la pareja Ris en la fecha acordada. Los primeros intercambios de correos electrónicos con AYC mencionaron las dificultades financieras de la agencia, que fueron puestas de manifiesto por su director, el Sr. Boutboul, en una respuesta oficial de otra empresa del grupo, Cap Océan.

Con el paso de los meses, la situación se empantanó. Entre marzo y mayo de 2024, se acumularon las promesas y disculpas de AYC, pero no se efectuó ningún pago. Exasperados y preocupados, los Ris recurrieron a la ayuda de un abogado para intentar resolver la situación. En mayo de 2024 se envió una notificación formal a la agencia.

Un caso llevado ante los tribunales

Ante la falta de respuesta concreta y las continuas dificultades financieras alegadas por AYC y Cap Océan, los Ris decidieron presentar una denuncia ante el fiscal de Tarascón por daños materiales e impago de las cantidades adeudadas. La abogada de la familia encargada del caso, Sarah Tarabay, subrayó el giro dramático que había tomado la venta para la familia:

"La situación es aún más triste por el hecho de que el Sr. Ris falleció durante este periodo, dejando a su mujer sola en la gestión de este complejo asunto. A día de hoy, los herederos aún no han recuperado el dinero de la venta del yate"

Un problema sistémico en la venta de embarcaciones

Este caso pone de relieve los riesgos asociados a las transacciones náuticas mal supervisadas. La confianza depositada en intermediarios, incluso especializados, puede resultar perjudicial en caso de fracaso financiero o administrativo.

Para evitar este tipo de situaciones, se recomienda a los propietarios de embarcaciones âeuros¯:

  • Compruebe la solidez financiera y las referencias del intermediario antes de firmar un mandato.
  • Incluir cláusulas de garantía en el mandato de venta, sobre todo en lo relativo al pago de fondos.
  • Contrata un seguro específico para cubrir el riesgo de impago.

Un caso en busca de solución

Los herederos del Sr. Ris prosiguen ahora su acción judicial y esperan un resultado rápido. Este caso, que ha provocado la indignación de la comunidad náutica, sirve de advertencia sobre la necesidad de una mayor transparencia y regulación en el sector de la venta de embarcaciones.

Incluso se ha creado un grupo de apoyo en las redes sociales, que reúne a otras presuntas víctimas para compartir sus experiencias y planteamientos ante este tipo de litigios.

    Lien vers le groupe de soutien :
Más artículos sobre el tema