Navegar a vela es más asequible y sostenible
¿Qué tienen en común una boya de amarre conectada, los tejidos compuestos de biso de mejillón y un tensor activo montado en un pontón? Entre Morphée, el producto hiperconectado desarrollado por dos licenciados en ingeniería , un pontón portuario de demostración, de estilo industrial por el momento, pero capaz de generar energía eléctrica y un material derivado de las barbas de los mejillones el vínculo está probablemente en su potencial para cambiar la imagen de la navegación.
Aunque el complejo contexto económico está haciendo de éste un momento delicado para las industrias náuticas, éstas no pueden cruzarse de brazos. La imagen de la náutica es esencial para atraer a nuevos aficionados. Para seguir siendo aceptable y deseable como actividad de ocio, la navegación debe ser sencilla y sin estrés, una vía que Morphée está explorando. También debe tener menos impacto en el medio ambiente y ser más resistente. La reutilización de residuos naturales en la construcción de embarcaciones y la producción local de energía libre de carbono en los puertos deportivos son dos vías que Morphée está explorando.
Esperemos que en estos tiempos de cambio, muchas más iniciativas como éstas vean la luz para dotar a la náutica de una dinámica cada vez más virtuosa y socialmente aceptable.