Aumentar los impuestos sobre la navegación de recreo, a raíz de las negociaciones en curso
Las 3 principales organizaciones que representan a la industria náutica en los Estados Unidos y Europa, el Consejo Internacional de Asociaciones de la Industria Marítima (ICOMIA), la Industria Náutica Europea (EBI) y la Asociación Nacional de Fabricantes Marinos (NMMA), han firmado una carta conjunta dirigida a Robert Lighthizer y Vladis Dombrovskis, encargados de las negociaciones comerciales para los Estados Unidos y la Comisión Europea. En la carta, piden a los dirigentes políticos que aprovechen el impulso positivo tras un primer acuerdo sobre la pesca de la langosta para hacer frente al impuesto del 25% que impone la Unión Europea a las importaciones de embarcaciones de recreo de los Estados Unidos. El impuesto se introdujo en 2018 como represalia por la guerra comercial de Donald Trump en las ventas de acero y aluminio.
Consecuencias económicas para la navegación en Europa y los Estados Unidos
En apoyo de su petición, las asociaciones señalan los efectos de la introducción de este impuesto en la industria náutica a ambos lados del Atlántico. Según sus estudios, las exportaciones de barcos de los Estados Unidos a Europa han disminuido en un 30%, lo que ha costado a los constructores de barcos estadounidenses más de 400 millones de dólares desde que entraron en vigor los aranceles. El aumento de los precios también ha afectado a los importadores, comerciantes y proveedores de servicios europeos que revenden productos de los Estados Unidos.